Lo pedían a gritos contra Argentina, pero recién contra Bolivia tuvo su oportunidad de jugar. Richard Sánchez fue la apuesta de Eduardo Berizzo para tener el balón y dar juego al medio sector de la selección, idea que no prosperó.
Colectivamente la Albirroja no respondió y eso afectó en el rendimiento individual a todos, incluyendo a Sánchez. En la primera no tuvo mucha relevancia su participación, la cual mejoró bastante en la complementaria, cuando se retrasó para jugar en una posición donde tuvo mayor contacto con el balón.
A continuación vemos los números que dejó el Cachorro en 90 minutos jugados, donde su aporte más importante fue la pelota que metió en profundidad, quebrando la resistencia defensiva rival y terminó en el gol del empate.

El volante albirrojo tuvo un 86% de precisión en sus pases y realizó con éxito 5 de 7 centros ensayados.
Sánchez intentó 2 remates al arco, pero ninguno tuvo el destino deseado, disputó 2 duelos y ganó 1, así como disputó 1 duelo aéreo, el cual lo terminó ganando.
DATOS: @Marca_Zonal