En un operativo fluvial realizado en el Río Paraguay, agentes de la Prefectura Naval y de la Policía Nacional incautaron una embarcación con 24 toneladas de papa de contrabando provenientes de Argentina. La intervención tuvo lugar en la zona ribereña de Puerto Pabla, Lambaré, y se estima que esta acción significó una pérdida de G. 150 millones para la estructura criminal detrás del ilícito.
El procedimiento, calificado como delicado por las autoridades, enfrentó dificultades debido a la bajante del río, lo que permitió que los contrabandistas huyeran a pie tras llegar a la orilla. A pesar de la incautación de la embarcación y la mercadería, no se registraron detenidos.
La carga consistía en más de 1.200 bolsas de papa identificadas con la inscripción «Villa Dolores», indicando su origen argentino. Cabe destacar que la importación de papa está actualmente prohibida en Paraguay como medida para proteger la producción nacional. Según datos del Ministerio de Agricultura y Ganadería, cada bolsa de papa tiene un valor promedio de G. 97.000 en el mercado mayorista.
La Armada Paraguaya advirtió que estos casos seguirán ocurriendo si no se refuerzan los procesos de investigación para desarticular las redes que operan en este tipo de ilícitos. Este golpe al contrabando pone de manifiesto la necesidad de un mayor control en las zonas fronterizas y fluviales.
El contrabando no solo afecta la economía nacional, sino que también representa un desafío constante para las fuerzas de seguridad que buscan frenar estas actividades ilegales en beneficio de los productores locales y la estabilidad del mercado interno.
