Las tensiones entre China y Taiwán aumentaron considerablemente este jueves luego de que el Ministerio de Defensa taiwanés detectara la incursión de 38 aviones de guerra y 11 buques del régimen chino en las cercanías de la isla durante las últimas 24 horas.
Una nueva provocación china
Esta alarmante acción se produce solo una semana después de que Beijing llevara a cabo un extenso ejercicio militar de dos días alrededor de Taiwán, en una clara señal de hostilidad hacia la isla.
La situación se agrava aún más con la presencia de delegaciones del Congreso de los Estados Unidos en Taiwán, las primeras desde la toma de posesión del presidente William Lai el pasado 20 de mayo.
Taiwán se defiende
El Ministerio de Defensa de Taiwán informó que 28 de las aeronaves chinas cruzaron la línea media del Estrecho, lo que provocó una respuesta inmediata por parte del ejército taiwanés, que desplegó aviones y barcos para monitorear la situación y defender su territorio.
Las hostilidades continúan
Los expertos advierten que estas nuevas provocaciones por parte de China podrían ser parte de una estrategia de «zona gris», que busca desgastar a las fuerzas militares taiwanesas sin llegar a un conflicto abierto.
El régimen de Xi Jinping ha dejado claro que reclama a Taiwán como parte de su territorio y que no dudará en usar la fuerza para tomar control de la isla.
Estados Unidos y Taiwán unidos
En medio de las crecientes tensiones, el presidente Lai ha manifestado su compromiso de trabajar con Estados Unidos para «contrarrestar el expansionismo autoritario» de China.
Las visitas de senadores y representantes estadounidenses a Taiwán en las últimas semanas han sido una muestra de apoyo a la isla y un claro mensaje de advertencia a China.
¿Se avecina un conflicto?
Las acciones de China generan gran preocupación en la comunidad internacional, que teme que la situación pueda derivar en un conflicto abierto entre las dos potencias.
La comunidad internacional insta al diálogo y la desescalada para evitar una confrontación militar que tendría graves consecuencias para la región y el mundo.
El futuro de Taiwán en juego
La situación actual pone en jaque el futuro de Taiwán, una isla que lucha por mantener su independencia y democracia frente a las constantes amenazas del régimen chino.
La comunidad internacional debe permanecer atenta a este delicado escenario y trabajar por una solución pacífica que respete la soberanía y la autodeterminación del pueblo taiwanés.