De manera unánime la Cámara Baja acaba de rechazar el proyecto de «Ley de Insolvencia» que permitirá que por 70 días de retraso en el pago de una deuda, el acreedor podrá gestionar la quiebra del deudor y éste deberá pagar a los abogados y a los síndicos. La histórica sesión reunió 80 votos sobre 80 diputados nacionales. El iniciativa vuelve a Senadores para su tercer trámite legislativo.
La iniciativa fue impulsada por el Ejecutivo.