Francia ha intensificado su postura en contra del acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur, que incluye a Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay. Antoine Armand, ministro de Economía francés, anunció que el gobierno francés utilizará “todos los medios” a su alcance para impedir que el pacto prospere en su formato actual, incluyendo mecanismos institucionales y el voto en el Consejo Europeo, con el objetivo de frenar el acuerdo.
Según Armand, París considera que las normas fitosanitarias y de competencia aplicadas por el Mercosur son “desleales” respecto a las europeas. Esta percepción de desventaja ha movilizado a sindicatos de agricultores y ganaderos franceses, que temen una entrada masiva de carne bovina sudamericana al mercado europeo. La semana comenzó con protestas de estos sectores en Francia, quienes exigen al gobierno proteger el mercado interno ante lo que perciben como competencia injusta.
El gobierno de Francia busca además persuadir a otros socios de la UE para que se sumen a su posición. Armand mencionó que Francia ha iniciado diálogos con Bélgica, Austria, Irlanda, Bulgaria e Italia, buscando formar un bloque opositor que dificulte la ratificación del acuerdo, cerrado en 2019 tras casi dos décadas de negociaciones, pero que sigue sin ratificación.
Por su parte, la Comisión Europea, encabezada nuevamente por Ursula von der Leyen, planea impulsar el acuerdo como parte de su estrategia para equilibrar la influencia de China en América Latina. Este objetivo ha cobrado relevancia y se prevé que los avances en el acuerdo UE-Mercosur se discutan en la próxima cumbre del G20, que se realizará en Brasil el 18 y 19 de noviembre, y en la cumbre del Mercosur, programada para diciembre.