En un operativo conjunto denominado Jejui, la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), liderada por Jalil Rachid, junto con el Comando de Operaciones de Defensa Interna (CODI) y el Ministerio Público, logró destruir 109 hectáreas de marihuana en la colonia Maracaná, Canindeyú. Este golpe anula la circulación de unas 337 toneladas de droga, valoradas en 50 millones de dólares en Brasil.
El procedimiento, realizado con apoyo de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), incluyó la incautación de 10 toneladas listas para su venta y la eliminación de tres campamentos narcos. Además, en Puente Kyha, se decomisó 1.571 kilos de marihuana prensada, aunque los traficantes lograron huir.
La creciente mecanización del cultivo de marihuana, camuflado entre cultivos legales, evidencia la inversión criminal en esta actividad, lo que permite mayor productividad. Canindeyú, junto con Concepción, San Pedro y Amambay, es una de las zonas más afectadas por el narcotráfico, donde el PCC controla alrededor de 7.000 hectáreas de producción.
Este golpe estratégico demuestra la capacidad operativa de las autoridades paraguayas para desmantelar redes criminales, marcando un importante avance en la lucha contra el narcotráfico en la región.
