El equipo femenino de espada junior sorprende al mundo y se posiciona entre las mejores
Las jóvenes esgrimistas paraguayas Luciana García, Janine Handspach y Jimena Cabrera han hecho historia al conquistar la medalla de bronce en la Copa del Mundo Junior de Esgrima, disputada en San Salvador, El Salvador. Este logro marca un hito sin precedentes para el deporte paraguayo, posicionando a nuestro país entre las potencias mundiales de esta disciplina.
Bajo la dirección del entrenador Juan Lucas, el equipo femenino demostró una técnica impecable y una gran capacidad de trabajo en equipo, superando a rivales de gran nivel. En su camino hacia el podio, las paraguayas lograron una contundente victoria sobre México en primera ronda y se enfrentaron a duras batallas contra Puerto Rico y Colombia.
Este triunfo no solo es un reconocimiento al talento y esfuerzo de las atletas, sino también al trabajo de la Federación Paraguaya de Esgrima y al apoyo brindado por las instituciones deportivas del país. La medalla de bronce obtenida en el Mundial Junior representa un gran impulso para el desarrollo de la esgrima en Paraguay y una inyección de motivación para las futuras generaciones de esgrimistas.
Un futuro prometedor
Este histórico logro coloca a Paraguay en el mapa mundial de la esgrima y abre nuevas perspectivas para el deporte. Los puntos obtenidos en el ranking de la Federación Internacional de Esgrima (FIE) permitirán a las atletas paraguayas acceder a competencias de mayor nivel y consolidar su posición en el escalafón mundial.
Además, esta medalla de bronce representa un impulso anímico para las esgrimistas paraguayas de cara a los Juegos Panamericanos Junior Asunción 2025, uno de los eventos deportivos más importantes del país. Las jóvenes talentos paraguayas tendrán la oportunidad de competir en casa y demostrar al mundo su gran potencial.
El equipo campeón
Luciana García, Janine Handspach y Jimena Cabrera se han convertido en un referente para el deporte paraguayo. Su dedicación, disciplina y talento las han llevado a alcanzar la cima del podio mundial. Este logro es un ejemplo para todos los jóvenes deportistas del país, demostrando que con esfuerzo y perseverancia se pueden alcanzar grandes metas.
Este logro histórico marca un antes y un después para la esgrima paraguaya. Las jóvenes esgrimistas han demostrado que el deporte paraguayo tiene un gran futuro por delante.