El melón, conocido científicamente como Cucumis melo, no solo es una opción refrescante, sino también un alimento con múltiples beneficios para la salud. Compuesto en más del 90 % por agua, es ideal para mantener el cuerpo hidratado, especialmente en verano. Su riqueza en vitaminas C y A, además de minerales como potasio, calcio y magnesio, lo convierten en un poderoso aliado contra diversas enfermedades.
El consumo habitual de melón fortalece el sistema inmunológico, combate infecciones y reduce el estrés oxidativo, previniendo enfermedades crónicas y el envejecimiento celular. Además, su contenido en potasio ayuda a regular la presión arterial, disminuyendo el riesgo de hipertensión y enfermedades cardiovasculares. La fibra y el agua que aporta mejoran el tránsito intestinal, combatiendo el estreñimiento.
El melón también protege la vista gracias a su alto contenido de vitamina A y carotenoides, que previenen problemas como la degeneración macular. Además, su riqueza en antioxidantes favorece una piel más joven y elástica, y contribuye al fortalecimiento de huesos y dientes, previniendo enfermedades como osteoporosis.
Valor nutricional del melón (por 100 g):
- Energía: 29 kcal
- Agua: 91,8 g
- Proteínas: 0,7 g
- Carbohidratos: 7,5 g
- Fibras: 0,3 g
- Vitamina C: 30 mg
- Vitamina A: 167 mcg
- Potasio: 216 mg

