El monseñor Adalberto Martínez, obispo de Villarrica y Caazapá, tuvo a su cargo la misa en el sexto día del Novenario de la Virgen de Caacupé. El tema central de este jueves fue: »La Eucaristía realiza la comunión con Dios y con los hermanos».
Durante la homilía el monseñor se refirió a los hechos registrados en el Norte del país y pidió por la liberación de los tres secuestrados por el grupo armado: Edelio Morínigo, Félix Urbieta y Óscar Denis.
Por otro lado, instó a la ciudadanía a no bajar la guardia con respecto a la pandemia del coronavirus. Pidió seguir estrictamente los protocolos indicados por autoridades sanitarias y realizar oraciones en familia desde nuestras casas sin la necesidad de peregrinar hasta la Basílica de Caacupé.
»La pandemia ha sido una oportunidad para que el pueblo paraguayo saque a relucir su sentido de projimidad y solidaridad, a compartir el pan con los hermanos más necesitados», expresó.
El monseñor agradeció a los trabajadores de blanco, fuerzas de seguridad, periodistas y a aquellas mujeres o voluntarios que dieron su mano para realizar ollas populares en unión con las comunidades.
