Paraguay se consolida como el motor económico de Sudamérica. Según el último informe del Fondo Monetario Internacional (FMI), nuestro país registrará un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del 3,8% en 2024, superando ampliamente el promedio regional de 1,8%.
Este destacado desempeño se debe principalmente a la solidez del sector agrícola, que se ha recuperado de los años de sequía y se proyecta una cosecha récord. Además, las inversiones extranjeras directas y la estabilidad macroeconómica contribuyen a este crecimiento sostenido.
En comparación con otros países de la región, Paraguay se destaca significativamente. Uruguay le sigue de cerca con un 3,2% de crecimiento proyectado, mientras que Brasil, Perú y Venezuela se mantendrían en un 3%. En contraste, Argentina enfrentaría una contracción de su economía del -3,5%.
Las proyecciones del FMI para Paraguay son aún más alentadoras para el próximo año, ya que se estima que el crecimiento se mantendrá en niveles similares. Esta estabilidad económica es una noticia positiva para el país y refuerza su posición como un destino atractivo para las inversiones.
El Banco Central del Paraguay comparte este optimismo y ha elevado su propia proyección de crecimiento para este año al 4%, lo que demuestra la confianza en la solidez de la economía paraguaya.