La noche del viernes y la madrugada del sábado, la policía de Moscú llevó a cabo redadas en discotecas LGBT de la capital rusa como parte de una escalada en la persecución contra el movimiento LGBT. Estos operativos se llevaron a cabo después de la reciente decisión del Tribunal Supremo de prohibir el movimiento LGBT, catalogándolo como «extremista».
Desarrollo de los Operativos
Las redadas iniciaron alrededor de las 22:00 horas (19:00 GMT) del viernes y se extendieron a varias discotecas y saunas LGBT. Durante los operativos, los efectivos policiales solicitaron los documentos de identidad de los presentes, fotografiándolos para, posteriormente, liberar a las personas que se encontraban en los establecimientos.
Según informes, los agentes policiales irrumpieron en varias saunas bajo la premisa de buscar drogas, utilizando esta excusa para llevar a cabo inspecciones y alterar el ambiente de diversión.
Testimonios y Reacciones
Testigos de las redadas informaron que la policía se comportó de manera irrespetuosa, obligando a las personas a acostarse boca abajo en el suelo. Además, se mencionó que la policía interrumpió la música en algunos lugares, fotografiando los pasaportes de los asistentes sin su consentimiento.
El Tribunal Supremo de Rusia prohibió el movimiento LGBT el jueves pasado, considerándolo «extremista». Esta decisión ha generado una ola de indignación entre las minorías sexuales y ha suscitado críticas por parte de activistas y juristas, quienes argumentan que va en contra de la libertad y la diversidad.
Contexto de la Prohibición LGBT
La prohibición abarca tanto la propaganda y publicidad LGBT como el fomento de interés y participación en dicho movimiento. Este fallo ha llevado a activistas a cuestionar la laicidad del Estado ruso y acusar al Kremlin de intentar controlar las conciencias, promoviendo valores familiares «tradicionales».
Mientras tanto, el presidente ruso, Vladimir Putin, ha expresado su deseo de convertir a Rusia en una «reserva moral» frente a las influencias occidentales, indicando que, aunque los homosexuales son parte de la sociedad, la obsesión con la igualdad de las minorías sexuales es excesiva.
Este informe proporciona una visión general de los recientes acontecimientos en la persecución contra el movimiento LGBT en Rusia. La situación sigue evolucionando, y la comunidad internacional ha condenado enérgicamente estas acciones.
