La Policía Nacional de Paraguay está abierta a recibir más cooperación de la DEA (Administración de Control de Drogas de Estados Unidos) tras la ruptura del convenio con la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), lo que ha generado controversia en el ámbito político. Aunque la Senad, según el viceministro antidrogas Esteban Casselli, asegura que esta medida fortalecerá a la institución, los opositores temen que debilite la lucha contra el narcotráfico en el país.
En una reunión con la Comisión de Prevención, Lucha contra el Narcotráfico y Delitos Conexos del Senado, Casselli explicó que la decisión permitiría reorganizar a los agentes que trabajaban en las Unidades de Investigación Sensitiva (SIU). Por su parte, el comandante de la Policía Nacional, Carlos Benítez, destacó la experiencia de la institución en la lucha contra el narcotráfico, mencionando que, desde 2010, la SIU ha realizado incautaciones récord. Además, mostró su disposición para recibir más apoyo de la DEA, aunque aún desconoce los detalles de cómo aumentará la cooperación tras el corte con la Senad.
El senador opositor Rubén Velázquez expresó sus dudas sobre los beneficios de esta medida, considerando que debilita a la Senad y afectará la capacidad de prevención y lucha contra el narcotráfico. «Con los recursos actuales de la Senad, no veo cómo se fortalecerá la lucha», indicó.
Por su parte, el diputado Raúl Benítez anunció que la Cámara de Diputados convocará a los ministros involucrados para que den explicaciones sobre la ruptura con la DEA, cuestionando si esta medida busca fortalecer la soberanía o si tiene implicaciones para el narcotráfico.
El debate sobre la cooperación internacional en la lucha contra el narcotráfico en Paraguay sigue abierto, y su resolución podría tener un impacto significativo en la seguridad y la estabilidad del país.

