En una declaración contundente, la senadora Celeste Amarilla arremetió contra la creciente ola de nepotismo que afecta a legisladores de diversos partidos, incluyendo el suyo propio. La parlamentaria liberal señaló que este fenómeno no es exclusivo de los colorados, ya que también se ha arraigado en partidos de oposición como Encuentro Nacional (PEN) y Patria Querida (PPQ).
“Todos han caído en este vicio”, afirmó la senadora, destacando que incluso el PEN, del cual solo Kattya forma parte, cuenta con una bancada minoritaria compuesta por 14 o 15 personas que han colocado a sus familiares en posiciones dentro del Parlamento. Amarilla condenó esta práctica como un «viejo vicio parlamentario».
La legisladora expresó su preocupación por la presencia de «apellidos conocidos» de exlegisladores en la nómina de funcionarios de ambas cámaras, sugiriendo que este nepotismo también se extiende a otras entidades del Estado. Calificó la situación como vergonzosa y criticó la falta de vergüenza de aquellos que ya no se molestan en ocultar estas prácticas.
La senadora celebró la revelación de casos de nepotismo, subrayando que es escasa la lista de parlamentarios que no han ubicado a sus allegados en cargos públicos. No cuestionó la preparación de los designados, sino el método de ingreso y la disparidad salarial respecto a aquellos que han construido sus carreras profesionalmente. Con esta denuncia, Amarilla busca arrojar luz sobre un problema arraigado en la política paraguaya y abogar por un cambio urgente en estas prácticas perjudiciales para la transparencia y la igualdad en el servicio público.